2013
Sinopsis:
En los márgenes del río Baztán, en el valle de Navarra, aparece el cuerpo desnudo de una adolescente en unas circunstancias que lo relacionan con un asesinato ocurrido en los alrededores un mes atrás. En esta novela negra, la inspectora de la sección de homicidios de la policía foral, Amaia Salazar, será la encargada de dirigir una investigación que la llevará de vuelta a Elizondo, una pequeña población de donde es originaria y de la que ha tratado de huir toda su vida. Enfrentada con las cada vez más complicadas derivaciones del caso y con sus propios fantasmas familiares, la investigación de Amaia es una carrera contrarreloj para dar con un asesino que puede mostrar el rostro más aterrador de una realidad brutal al tiempo que convocar a los seres más inquietantes de las leyendas del Norte...
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Aviso que en las opiniones que doy de este libro al final de esta reseña pueden aparecer comentarios que desvelen algunos aspectos de la novela que no se conocen hasta el final, aunque en ningún caso voy a dar ninguna pista de quién es el asesino.
Ésta es la primera entrega de la trilogía del Baztán. Su autora, Dolores Redondo Meira Donostia (San Sebastián, 1969) estudió Derecho y restauración y durante algunos años se dedicó a los negocios. Decidida a iniciarse en la literatura, comenzó escribiendo relatos cortos y cuentos infantiles. En 2009 publicó su primera novela, "Los Privilegios del Ángel" (Eunate Editorial), una reflexión sobre la magia y en encanto que supone el descubrimiento de los escenarios cotidianos en la niñez. "El guardián invisible" ha tenido una enorme difusión en los medios y con toda seguridad será un éxito comercial.
La crítica habla de ella como de "una novela policíaca impactante que tiene su mejor baza en el contraste entre lo racional y científico, y lo legendario y mítico. Un thriller literario que mezcla con originalidad el realismo de una investigación policial con elementos mágicos de la mitología vasco-navarra. Su protagonista es la policía foral Amaia Salazar, una preparadísima agente que ha incorporado las técnicas del FBI y que, por otro lado, tiene un pasado oscuro y atormentado, decisivo en la trama. Un extraordinario contraste entre fortaleza y fragilidad que la sitúa como clara heredera de la Clarice Starling de El Silencio de los corderos". La autora ya está trabajando en su próxima obra con la inspectora Amaia Salazar como protagonista, la que será la segunda entrega de su planeada Trilogía del Baztán, cuyos derechos cinematográficos ya ha comprado el mismo productor que compró los derechos de la trilogía de Stieg Larsson, Millennium.
Mis sensaciones después de leer el libro son un tanto contradictorias. Por una parte, me ha parecido que parte de una muy buena idea de fondo y que estructura la trama con sabiduría, administrando poco a poco al lector pistas que le permiten ir adentrándose en el pasado de la inspectora Salazar y su complicada historia familiar, combinando esta profundización en los sentimientos y traumas de la protagonistas con los avances en una investigación que va implicando también a otros miembros de la familia cuyos entresijos se nos van mostrando; al mismo tiempo la autora aporta fragmentos de gran intensidad dramática y creo que hace una muy buena disección de la protagonista. Por contra, no puedo decir lo mismo de alguno de los personajes, que quedan reducidos a meros estereotipos no muy creíbles: su marido, su hermana mayor (con unos rasgos de mala de película de Disney más que otra cosa), incluso la tía Engrasi, que se nos presenta más creíble en su papel de adivina echadora de cartas que de psicóloga de la familia (¿puede una licenciada en psicología haber tratado tan desastrosamente el trauma por el que tuvo que pasar su sobrina en la infancia?).
En cuanto a la forma de narrar de la autora, ha habido párrafos, sobre todo los que narran las pesadillas de Amaia y las descripciones de su terrible experiencia pasada, que me han fascinado, pero en otros momentos parece que la autora quiere simplemente alargar la narración y pasa del tono de thriller al de folleto de divulgación cultural o científica, con unas largas descripciones sobre las calles o historia de Elizondo o Ainsa y sobre en qué consisten los análisis de laboratorio que no aportan nada a la historia a mi modo de ver.
Otro aspecto de la novela que no me ha gustado es que los seres míticos que en un principio parecían ser simplemente un elemento para crear un ambiente mágico a la vez que misterioso, se hagan realidad y la protagonista realmente vea a esos seres mitológicos que son el basajun y la diosa Mari, por no hablar de la aparición del espíritu maligno de una de las víctimas. Puede que estos elementos vendan mucho, pero a mi me resultan muy poco convincentes y nada apropiados en una novela que trata de una investigación policial. No es que esté en contra del uso de aspectos "paranormales" en este género -de hecho, la última que leí de Asa Larsson contaba entre sus protagonistas con el espíritu de una víctima de asesinato-, es la integración de estos elementos con la historia, o más bien la falta de integración la que me disgusta: ¿qué tiene que ver realmente el basajun con los crímenes que nos cuentan? Pues nada. ¿Y por qué Mari le cuenta a Amaia que ha visto a un hombre realizando actividades extrañas en el río? Pues para enlazar con el siguiente libro de la autora, supongo, pero que una investigadora se entere así de unos crímenes me chirría bastante, la verdad.
Mi impresión de conjunto es que la novela parte de una buena materia prima y que la escritora tiene valía, pero que ha exagerado un tanto en los elementos que hacen la novela más "vendible". Lo que no se puede dudar es que cuenta con una buena campaña de promoción y que el final deja claramente con las ganas de saber qué más va a pasar en el Baztán.
A mi se me ha hecho tan pesada que la he dejado a la mitad. No he podido ni terminarla.
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